La leishmaniosis es una enfermedad provocada por un parásito que se transmite con la picadura de un flebotomo (insecto parecido a un mosquito).
En la zona del sur de Europa, se dan más de 700 casos de leishmaniosis humana al año y alrededor de un 25% de los perros tienen leishmania.
La Leishmaniosis es una enfermedad zoonótica, esto quiere decir que se transmite de los animales a los humanos, por ello tienen una gran importancia para la salud pública el control y la prevención de esta enfermedad. Es importante saber que vivir con un perro infectado no aumenta el riesgo de transmisión a las personas.
Los síntomas de esta enfermedad pueden ser muy diferentes en cada paciente. pueden aparecer heridas en la piel, cojeras, problemas en el hígado, en el riñón… y estos Síntomas pueden ir de leves a muy graves.
En Europa
En Europa la leishmaniosis canina ha sido descrita en regiones mediterráneas. Esta enfermedad es endémica (muy frecuente) en países como: Chipre, Grecia, Albania, Croacia, Italia, Malta, Francia, España y Portugal.
Hoy en día, la movilidad entre países de los perros junto con los cambios climáticos han dado lugar a un aumento de casos en países del norte de Europa también, como Alemania, Holanda, Reino unido y Polonia. Además en países del este como Bulgaria, Hungría y Rumania ya tienen casos de Leishmaniosis.
En España
Aunque la prevalencia de la infección es menor en el norte de España, se ha visto un aumento de los casos en los últimos años, detectándose ya perros con enfermedad en toda España.
¿Qué podemos hacer para evitar la enfermedad en animales y secundariamente en humanos?
- Usar repelentes de insectos todo el año: antiparasitarios.
- Vacunar a animales no enfermos.
- Revisar periódicamente a los animales incluyendo análisis de leishmania.
- No criar con animales positivos a la enfermedad.
Métodos de prevención:
- Repelentes del insecto
Una de las medidas más importantes de las que disponemos es el uso de repelentes e insecticidas: collares o pipetas, estos son productos muy seguros. Con ellos conseguimos que los insectos no piquen y además los eliminamos, con lo cual reducimos la transmisión de la enfermedad.
2. Vacunación: Hace que si el insecto transmite el parásito, el sistema inmune del perro pueda eliminarlo sin causar enfermedad. existen dos vacunas disponibles en el mercado.
3. Fármacos (Leisguard(R)) :disminuye el riesgo de desarrollar la enfermedad cuando se le ha transmitido el parásito.
La combinación de las diferentes medidas es lo ideal para el control de la enfermedad.
4. Control del ambiente: La transmisión de la enfermedad se da mayoritariamente en áreas rurales y periurbanas, particularmente en casas con patio o jardín, por lo que es recomendable que los animales se mantengan en el interior en las horas de alimentación del flebotomo (amanecer o atardecer).
Conclusiones
La leishmaniosis canina es una enfermedad que está en aumento en España, es fundamental tomar medidas para la prevención y el control, siendo fundamental la detección temprana de la enfermedad.
Recientemente se han publicado estudios que concluyen que aplicar una combinación de medidas preventivas, como repelentes, inmunoestimulantes y vacunas es capaz de aportar un beneficio para prevenir la leishmaniosis canina comparándolo con el uso de un solo método por separado.
Si tienes cualquier duda sobre la Leishmaniosis, no dudes en preguntarnos. 🙂